El 10 de agosto de 2024, Alfonso Obregón fue detenido en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México cuando se disponía a salir del país por motivos de trabajo. La detención fue motivada por una denuncia de abuso sexual que había sido presentada previamente por una de sus estudiantes. A partir de ese momento, se desató una tormenta mediática y social en torno a su culpabilidad, con opiniones divididas sobre el caso. En las redes sociales, muchas personas lo juzgaron sin tener pruebas suficientes, mientras otros pedían que se respetara la presunción de inocencia, un principio fundamental del derecho mexicano consagrado en el artículo 13 del Código Nacional de Procedimientos Penales.
A lo largo del proceso, Alfonso Obregón enfrentó dos acusaciones separadas. La primera denuncia fue desestimada por falta de pruebas, y en la segunda fue exonerado, ya que los jueces resolvieron que no existían elementos suficientes para vincularlo a proceso por abuso sexual. Sin embargo, estos hechos no le evitaron pasar 13 días en prisión preventiva y enfrentar el juicio público que dejó una mancha en su imagen profesional, aunque su culpabilidad no fue comprobada. Como él mismo señaló, a pesar de haber sido liberado y declarado inocente, el daño a su reputación y a su libertad durante esos días es algo que no puede recuperarse.
La forma en que se desarrolló su presunta culpabilidad fue particularmente polémica. Mientras que algunos acusadores sostenían que las acciones de Obregón constituían un abuso de poder y una agresión, él defendió que su comportamiento durante las clases fue meramente didáctico, sin ninguna intención sexual. En varias declaraciones públicas, Obregón reconoció haber cometido el error de tener una confianza excesiva con sus alumnos, pero subrayó que nunca tuvo fines lúbricos en sus interacciones. Si hacemos un análisis jurídico será los siguiente:
Presunción de Inocencia (Artículo 13 del Código Nacional de Procedimientos Penales) En México, la presunción de inocencia es un derecho fundamental garantizado por la Constitución y el Código Nacional de Procedimientos Penales. Según el artículo 13, toda persona acusada de un delito debe ser considerada inocente hasta que se demuestre lo contrario en un juicio justo. En el caso de Obregón, se menciona que varias personas en redes sociales lo juzgaron sin pruebas, lo que va en contra de este principio.
Reflexión: "Todos somos inocentes hasta que el Ministerio Público diga lo contrario… y después de eso, los memes no perdonan". En este caso, el juicio público en redes sociales fue prematuro y sin sustento legal.
Falsedad de declaraciones y acusaciones infundadas (Artículo 247 del Código Penal Federal) Alfonso Obregón fue exonerado de algunos de los cargos por falta de pruebas, lo que nos lleva a cuestionar si hubo falsedad en las acusaciones. El artículo 247 del Código Penal Federal castiga a quienes imputan un delito sabiendo que es falso. Sin embargo, en muchos casos como este, aunque se pueda demostrar la inocencia del acusado, las consecuencias sociales y laborales ya han causado daños irreversibles.
Cita célebre del derecho: "La justicia no es más que la verdad en acción" – Benjamin Disraeli. Aunque en el caso de Obregón la justicia fue clara, el daño social ya estaba hecho.
Detención y prisión preventiva (Artículo 19 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos) Alfonso Obregón pasó 13 días en prisión preventiva. Según el artículo 19 de la Constitución, la prisión preventiva solo se justifica cuando se trata de delitos graves o cuando hay riesgo de que el acusado pueda evadir la justicia. Aunque fue absuelto, el proceso reveló la complejidad de las acusaciones de este tipo, y cómo la detención preventiva afecta la vida de una persona.
Humor mexicano: "13 días en el reclusorio, y ni un solo día de quincena. A veces la justicia tarda… pero la vida no te la regresa ni con tiempo compartido."
Reflexión final
Hay que ser cautelosos al juzgar, ya que las acusaciones falsas no solo dañan la vida de las personas, sino que también desprestigian a quienes realmente necesitan justicia. Alfonso Obregón fue liberado y declarado inocente, pero su reputación quedó manchada. El sistema judicial mexicano tiene mecanismos para proteger a los inocentes, pero aún falta mejorar el seguimiento de los casos, sobre todo, evitar juicios prematuros en redes sociales, los límites del consentimiento, la confianza entre maestros y alumnos, y los daños colaterales que pueden generar las acusaciones falsas, en un país donde el abuso sexual es un tema sensible y urgente, pero donde también se debe garantizar que las personas no sean condenadas sin un debido proceso judicial.
