Este programa es para quienes buscan controlar lo incontrolable. Puedes reemplazar, borrar, insertar, y hasta reescribir texto en nombres de archivos y carpetas con una precisión quirúrgica, casi como si estuvieras reescribiendo capítulos de un libro que ya está escrito. Pero incluso aquí, solo puedes cambiar la apariencia de las cosas; el contenido sigue siendo el mismo, como esos recuerdos que intentas olvidar cambiando su contexto, pero que siempre permanecen.
The FileRenamer te permite hacer cosas tan detalladas como reemplazar diéresis y usar expresiones regulares para patrones específicos. Pero vamos, ¿a quién engañamos? A veces, ni siquiera sabemos qué patrón seguimos en nuestras propias vidas. Es como tratar de encontrar sentido en las cosas pequeñas cuando el panorama completo se siente tan desordenado.
Y ahí está, en su rincón melancólico: The FileRenamer, prometiendo una pequeña chispa de orden en un mundo desbordante de caos digital. Te permite modificar fechas de creación y atributos, como si con un cambio de fecha pudieras volver atrás en el tiempo y corregir errores pasados. Pero sabemos que eso no es posible; no hay CTRL+Z en la vida real, solo en este pequeño programa que, en su intento de renombrar archivos, nos recuerda que hay cosas que no se pueden cambiar, no importa cuántas veces lo intentes.
Al final, The FileRenamer no cambia los contenidos de tus archivos, solo sus nombres. Y tal vez ahí radica su lección más profunda: puedes cambiar cómo llamas a algo, pero eso no altera su esencia. Así que descarga The FileRenamer, y en el proceso, quizás descubras que renombrar archivos no es más que un intento nostálgico de poner en orden lo que es inherentemente desordenado.