INTRODUCCION
El Path of Exile 2 es como cuando doña Lupe le pone amor a los tamales: se parece al anterior, pero está más sabroso. Aquí tenemos gráficos más chidos, jugabilidad renovada, y para variar, los devs se apiadaron de los novatos. Ya no te vas a sentir como niño perdido en el mercado al ver el árbol de talentos, porque ahora puedes armarte un mono fregón sin una guía de 80 páginas.
LAS CLASES PRINCIPALES
Te dejo el desglose de las seis clases iniciales. Cada una viene con subclases (ascensiones) que las hacen únicas, como si el Pozole viniera en rojo, verde o blanco.
MONJE
Este cuate es el ninja espiritual. Ágil como repartidor en bici, pega y se retira antes de que le digan: "¡pásele, joven!". Usa elementos como hielo, viento y electricidad. Es perfecto para el que quiere ser como un Ángel de Charlie, elegante pero letal. Además, puede saltar como chapulín.
GUERRERO
El clásico tanque que aguanta más que el iPhone de tu primo. Este guerrero no solo bloquea con su escudo como si le debieras dinero, también puede ir con armas de dos manos o dos espadas al mismo tiempo. Es el héroe melé para los que quieren repartir como tamales en quermés.
RANGER
Aquí tienes al Legolas del barrio. Ágil, con movimientos wasd (como si fuera shooter) y habilidades de veneno, hielo y rayo. Este mono es para los que disfrutan eso de disparar flechas mientras huyen, como si los estuvieran correteando en la colonia.
MERCENARIO
El primo pesado del Ranger. Usa ballestas y granadas, pero con menos agilidad. Este es el loco que causa caos a distancia, con explosiones y balistas. Si amas el drama visual y las explosiones, este es tu gallo.
BRUJA
La abuelita que siempre quisiste tener. Invoca esqueletos, maldice enemigos y controla un ejército de minions. Pero no te emociones, ahora tienes que estar más metido en el combate, no solo viendo cómo tus invocaciones chambean.
HECHICERA
La clásica maga de toda la vida, con habilidades elementales que combinan como mezclar horchata con tequila (¡no lo hagas!). Mete fuegazos, rayos y hasta te permite cambiar talentos dependiendo del arma que uses. Es puro espectáculo de partículas y destrucción.
TALENTOS Y PASIVAS
El árbol de talentos sigue siendo como un árbol navideño lleno de esferas. Es intimidante, pero ahora cualquier nodo que elijas sirve, así que ya no necesitas un tutorial de 3 horas para armar algo decente. Además, puedes combinar armas y talentos como si estuvieras haciendo un combo buffet.
OBJETOS Y CRAFTEO
Aquí no se trata solo de conseguir legendarios a lo loco como en otros juegos (cof, cof, Diablo). En Path of Exile 2, los objetos amarillos son la crema y nata, y el crafteo es la clave. Puedes mejorar y personalizar tus piezas como un mecánico tuneando un Vocho.
ASCENSIONES (SUBCLASES)
Las subclases le dan otro giro a tu mono. Por ejemplo, si eliges Guerrero, puedes especializarte en terremotos masivos o en usar dos armas de dos manos como un loco. Son como toppings de pizza; hay para todos los gustos.
ACTOS E HISTORIA
En el early access solo tendrás tres actos iniciales, pero los puedes rejugar en una dificultad más alta llamada "cruel". La historia es épica, pero aquí vinimos a destrozar enemigos, no a leer un libro de Cien años de soledad, ¿o qué no?
ENDGAME
Ah, el Atlas. Este es el lugar donde las horas desaparecen. Mapas infinitos, combinaciones de enemigos al azar y cofres con sorpresas (buenas y malas). Aquí es donde decides si te vuelves un vicioso del grindeo o te vas a dormir como una persona normal.
BOSSES DE PINÁCULO
Los jefes más rudos del juego. No son cualquier cosa; necesitas completar actividades, derrotar facciones y ganarte el derecho a enfrentarlos. Es como llegar a la final de un torneo de barrio: puro nivel alto.
ACCESO ANTICIPADO
Si quieres jugar el 6 de diciembre, necesitas desembolsar 30 dólares. Pero oye, te dan cosméticos y monedas del juego. Solo no te las gastes todas en skins, mejor úsalas para algo útil.
CONCLUSIÓN
Path of Exile 2 es como un mole bien hecho: complejo, sabroso y con capas de sabor que te dejan boquiabierto. Prepárate para invertir horas y horas, porque este juego no es de los que acabas en un fin de semana. ¡Saca las chelas y a darle!
